Como ha sucedido tendencialmente con los procesos de mercantilización de la vida que, de manera paulatina pero progresiva, se exacerban en la fase neoliberal de la sociedad capitalista tardía, el conocimiento científico se expone a nuevos acercamientos que clausuran las posibilidades para que sus usos afirmen la vida humana. Diferentes dispositivos tanto a nivel discursivo como práctico e ideológico parecen agotar alrededor de la gobernanza o la (nueva) gestión del conocimiento los marcos mercantiles en los cuales la universidad no está exenta de ser valorada desde las (i)lógicas de mercado. Por este motivo, las técnicas que se suponen neutrales, incluso aquellas autoproclamadas simplemente como herramientas pragmáticas, desafortunadamente ampliamente naturalizadas en el quehacer universitario y sus políticas, deben ser parte de una reflexión crítica. Una caracterización de la universidad neoliberal es al mismo tiempo un punto de referencia y un punto de partida afortunados para recrear una dimensión crítica y abrir las ciencias desde la universidad. En este sentido, la apertura y reestructuración del conocimiento científico caminando hacia lo común como praxis de la construcción colectiva posibilitará un nuevo consenso (como propone I. Wallerstein) o un novedoso nuevo espíritu científico (como lo han demandado G. Durand, desde los márgenes críticos europeos, y también E. Dussel, desde las profundidades del pensamiento nuestroamericano) para cuestionar radicalmente las divisiones intelectuales universitarias y reivindicar una síntesis desde lo humano, entendido como una unidad en la diversidad, un metabolismo ecológico que se fundamenta en sus múltiples determinaciones, tanto a nivel epistémico como organizacional. Esperamos que este libro se constituya en un aporte para pensar las reformas que requiere el modelo de investigación científica para el sistema de universidades estatales colombianas, elementos centrales a la hora de defender la universidad y el conocimiento como bienes comunes de la humanidad.